Que ya recuerdo lo que era ponerse nerviosa, respirar y
esperar.
Y mandar guasaps sin sentido,
consentido.
Que echaba de menos hacerme la dura
ir con pies de plomo pisando en arenas movedizas
mientras yo me derrito,
mientras yo me mojo.
Pero sin mojarme demasiado.
Que ya recuerdo lo que era “hablar de ti porque si
hablo de mí se enamoran”.
Que igual un clavo sí saca a otro previo-
Aunque sé que no hay nada más que lo que hay.
Es menester.
Sonreír ante una pantalla
que es verdad y estoy con la regla, pero si no
escribo cuando estoy ñoña no lo haré nunca más.
Ya no me identifico con cosas super tristes y deprimentes
ya no es invierno
estoy en una primavera a caballo entre el calor y el
frio,
cabalgando con quien lo ha conseguido.
Espero guasap.
Me esperaba y ya me tengo
Otra vez, vivita y coleando.
Vivita y zorreando.
Y sintiendo.
Y sintiendo algo más que nada.
Sintiendo revolución.
Sintiendo emoción.
La vida ya me emocionaba pero ahora me emociona
también la humanidad.
Me emociono yo.
Porque además he crecido.
No pienso que sea perfecto,
no le conozco para emitir un juicio de valor sobre
él,
ni soy quien, siquiera, para hacerlo.
pero sé que, sea lo que sea,
me folle como me folle
me ha salvado la vida,
el cuello
la suerte
la fe.
Cree en la democracia
Es activo política y sexualmente
¡Cree en la democracia!
Y yo no.
Es un cursi.
Haga lo que haga será lo correcto.
Sea
como sea me ha hecho ya
bien.
No creo
en el amor eterno
si la
eternidad tiende a infinito
sí, si
la eternidad es un número definido
pero sin
definir.
Indefinido.
En definitiva
que
no hay que ponerle límite
pero
tampoco esperar que vaya con Buzz Lightyear.
Solo
era eso
Solo
era yo, otra vez.
Que me
encantaría escribir
Y
llenar un folio de metáforas
Y
alegorías
Y
alegría.
Y decir
que “el frío se ha hecho ciudad”
como
dice Escandar.
O que
fuese a mí a la que le salieran versos como los de Carlos Salem
y decirle a alguien lo de que
"Duermes
como la vida
cuando
la vida está satisfecha"
me
encantaría saber escribir bonito
dejar
mi pragmatismo
ser más
pasional,
más
salvaje
más yo
cuando yo era contigo y tú eras ése.
Era
bonico.
Pero yo
ahora soy libre.
Y más
feliz
Y
perfecta
Ahora
no necesito que nadie me diga que soy perfecta
y me
cante lo que le suplicaba que me cantase con la voz del idiota de Luis Ramiro.
Y yo
qué sé. Que me acepto
Que me
quiero como soy
¿y cómo
soy?